Por Alejandro Carrera y Alejandro Marchionna Faré
COMENTARIO DEL ARTÍCULO 262 – LEY DE SOCIEDADES COMERCIALES
El uso de distintas clases de acciones tiene que ver con el ejercicio del control y de la influencia sobre la marcha de la empresa. Es el grupo fundador el que, al abrir el capital a otros inversores, ya sea a través de una OPA u oferta pública de acciones – conocida en inglés como IPO – o en forma privada, hace este tipo de propuesta. Se entiende que aquellas personas que aceptan invertir en una empresa cediendo en parte o en todo el poder de nombrar directores y, en consecuencia, influir en el gobierno corporativo, lo hacen libremente. Desde el punto de vista práctico tiene el efecto de un acuerdo de accionistas.
En los mercados de valores más desarrollados, sin embargo, la cuestión de diversas clases de acciones es vista como un recuerdo de otra época de menor transparencia en la gobernanza corporativa. En la Europa continental de las décadas del 80 y del 90 los grupos de control se abroquelaban para defenderse mutuamente del ataque de inversores o grupos más agresivos que buscaban abrir las empresas a la gestión del valor para el accionista. Surgen frases como “le noyau dur” o “el núcleo duro”, que en Francia estaba constituido por acuerdos de accionistas para asegurarse el control de ciertas empresas, sobre todo con vistas a mantenerlas bajo control “franco-francés”. En Italia la frase de moda era “il salotto buono” o “el living correcto”, que sintetizaba ingenierías de control manejadas por el legendario Enrico Cuccia del banco de inversión Mediobanca.
Disposiciones similares al artículo 262 le permitían, entonces, a dichos grupos controlar una mayoría del directorio a veces con tenencias que no superaban el 20% del capital accionario. No es de sorprender que hubiera varias combinaciones entre grupos de ambos países para mantener el control de ciertas empresas que, como en el caso de la italiana Assicurazioni Generali, terminó teniendo en su sede de Trieste a un presidente francés.
Los mercados de capitales de los países anglosajones siempre fueron más reacios a aceptar estas prácticas y, de hecho, fueron los pioneros en relegarlas al olvido. Hoy se considera de buen gobierno corporativo que no haya diferentes clases de acciones y que todos los accionistas tengan igual poder de voto en una asamblea.
ARTÍCULO 262 – LEY 19.550 DE SOCIEDADES COMERCIALES
Elección por categoría.
Cuando existan diversas clases de acciones el estatuto puede prever que cada una de ellas elija uno o más directores, a cuyo efecto reglamentará la elección.
Remoción.
La remoción se hará por la asamblea de accionistas de la clase, salvo los casos de los artículo 264 y 276.